Información sobre la agricultura vertical
Muchas granjas tradicionales al aire libre adoptan una filosofía de "rociar y rezar" cuando se trata de pesticidas. Pueden emplear medidas preventivas básicas, pero al final, confían principalmente en productos químicos para mantener a raya patógenos, malezas, insectos, hongos y roedores.
Pero una granja interior del siglo XXI necesita más que toxinas y espantapájaros para cultivar cultivos confiables ciclo tras ciclo. La Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos esbozó tres pilares simples en los que se basan todos los planes sólidos de MIP:
Estos principios, sin embargo, no están completos sin prestar atención cuidadosa a la acción. Cuando inspeccionas tus plantas, por ejemplo, ¿cómo identificas las criaturas que encuentras? La presencia de algunas moscas no significa una infestación, y muchas criaturas introducidas accidentalmente en tu granja vertical son inofensivas y no requieren una respuesta de MIP. La pregunta es si tu equipo está capacitado para conocer la diferencia.
Dependiendo del tipo de plagas, puedes emplear diferentes tácticas de respuesta. Se trata de comprender la biología y los patrones reproductivos de las criaturas autóctonas de tu entorno inmediato, analizar la amenaza que representan en el momento y responder adecuadamente cuando cruzan los umbrales de MIP que has establecido.
¿Qué medidas activas pueden emplear las granjas verticales tanto como procedimiento operativo estándar como en respuesta directa?
En un entorno de cultivo interior, las cuatro paredes de su instalación harán mucho para mantener alejadas las plagas, pero de ninguna manera son infalibles. Cosas tan pequeñas como un contenedor de basura sin asegurar o una cafetería de empleados sucia pueden atraer plagas y exponer sus cultivos. Incluso los empleados pueden llevar las semillas de una maleza problemática en su ropa sin siquiera saberlo.
Un código de vestimenta que incluya ropa de laboratorio sanitaria y un proceso de descontaminación es un enfoque común, que se refuerza con inversiones tecnológicas como tratamientos de luz ultravioleta para sistemas de riego. Pero al final del día, se trata realmente de construir una cultura de limpieza que el personal trate como algo natural.
El control del clima ayuda a la IPM utilizando la temperatura, la humedad y la ventilación contra patógenos, hongos y otras plagas que son susceptibles a sus fluctuaciones.
También vale la pena considerar los sistemas móviles de estanterías de cultivo vertical como medida preventiva contra la contaminación. Cuando limita el acceso no autorizado a través de estanterías móviles plegables y monitorea quién accede a qué estanterías y cuándo, características que se encuentran en el software de monitoreo remoto ePulse integrado de Montel, reduce la exposición y crea un rastro digital para seguir como parte de su estrategia de mitigación de IPM si ocurre un brote.
Cada instancia reportada de un brote de plagas o patógenos es una oportunidad de aprendizaje y una prueba de estrés para los protocolos de mitigación implementados. Trátelo de esa manera al incorporar una autoevaluación post mortem en su estrategia de IPM.
Aunque las granjas verticales de interior se diferencian de la agricultura tradicional al aire libre, estos espacios siguen siendo una especie de ecosistema, uno que responde favorablemente al equilibrio. Sí, el control integrado de plagas es necesario para prevenir la pérdida de cultivos y proteger la seguridad de nuestros productos, pero esta próxima evolución en la agricultura es una oportunidad para que la industria practique la sostenibilidad y logre, a través de la ciencia y la tecnología, la armonía con la vida vegetal.
Para obtener más información sobre cómo las estanterías móviles de cultivo vertical en interiores de Montel pueden formar parte de su plan de manejo integrado de plagas, comuníquese con su Distribuidor Autorizado de Montel local y pregunte sobre nuestra consulta gratuita sin compromiso, que incluye representaciones en 2D y 3D de su instalación equipada con estanterías móviles.